miércoles, 5 de mayo de 2010

Carta de Autor

Desde que anunciara mi definitiva despedida o prematuro retiro, sea inmediato, momentáneo o definitivo, no había tenido la inspiración de volver a escribir. Quizás sumido en el letargo de tantas dudas que me abordan generados, por los prontos cambios en mi rutinaria vida.

Escribir, narrar, y contar historias es una de mis principales pasiones. Aún busco con urgencia, mis borradores, que seguramente; en una de mis tantas mudanzas tras papelara.

He estado alejado de la pluma, en esta era tecnológica quizás de las teclas porque no encontraba un motivo para volver a publicar, pero después de leer una historia de box, escrita por un nuevo amigo( Jesús Alzamora), he podido encontrar respuesta a muchas de mis inquietudes en los últimos cuatro meses.

Yo escribo porque tengo una vena que no debo auto bloquear y mi gran motivo para dejar fluir este goce son todos mis compañeros del blog. Son 56 seguidores que no debo desatender,Sin contar los lectores de paso que aún no son seguidores.
Por eso, por respeto a los que me han seguido debo volver a la carga. Gracias por acompañarme y existir. A cada uno de ustedes muchas gracias, porque en este periodo de cambios radicales en mi historia diaria, ustedes son un motivo para sonreír y buscar motivación en la Fe de querer hacer las cosas siempre bien.

Un fraterno abrazo y espero les guste este post que va en honor a mi madre, aprovechando que este fin es el día de las mamas en el Perú, un saludo gigante y el post va dedicado no sólo a mi Má sino a todas las madres que viven físicamente, como Betty, la mía o en nuestros corazones, como lo hace, mi abuela Paulita. !Feliz día Mamá!
Paco Bazán.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Por amor al juego


Hace algunos años en la comodidad de mi casa tuve la suerte de ver una melancólica historia de amor. Donde Kevin Costner, le sabía dar vida a un “beisbolista” profesional de la liga nacional estadounidense. Una historia de amor magnífica, finalmente, lo poco que sé de cine es que todas son historias de amor. Pero, que nos mantenía, a los que amamos el deporte, en suspenso con la particular vida de este exitoso “pitcher” norte americano. La historia se paralizaba en su último juego, en la decisión que debiera tomar a sus 40 años. Y durante el transcurso con éxito de lo que sería su último partido. Igualmente, con esa audacia que tienen los experimentados directores de cine norte americano, viajábamos por los últimos sucesos, recuerdos de la carrera y por los profundos mares en las memorias de la vida personal del ficticio Kevin Costner.
Yo no soy Kevin Costner, ni su héroe de ficción, exitoso por cierto. Mi historia creo que finalmente es atractiva para pocas personas. Mi carrera quizás no ha sido ni un cuarto de maravillosa como lo son las grandes producciones hollywoodenses. Pero, a lo largo de estos últimos dos años yo también me he visto forzado, por las circunstancias dadas, en tomar una decisión que quizás jamás imaginé tendría que tomar a tan corta edad. Menos en mi condición de arquero, puesto de tanta longevidad, tan longevo como el de un “pitcher de beisbol” norteamericano.
Como decía, hace dos años empezó la triste historia del fin de mi carrera. Aunque tengo en mente en esa película tan propia, que realmente mi fin comenzó hace cinco años, en tierras Gallegas. Cuando en algunos exámenes médicos con el Pontevedra, me diagnosticaran Artrosis degenerativa en la articulación del hombro izquierdo.
¿Artrosis? Me dije, acaso no había escuchado antes que esto era una enfermedad de vejez. Que se presenta en el fin de la vida de nuestros abuelos. Sí, artrosis,esa mismísima enfermedad, aunque aún no sé cómo funciona, pero, sé que la sufro bien y como jode la condená.. A esto además, se le suma algunas inestabilidades, también en la articulación y bloqueos del mismo.
Estos últimos meses, desde la lesión en el clásico han sido como el final de esta comedia romántica deportiva, la he mirado en cámara lenta una y otra vez. He jugado con el retroceso del DVD hasta el menú de configuración o menú inicial tantísimo ha sido posible. Revisando como cuando buscas la opción de subtitular, desesperado en si todo esta correcto. Mi cinta ha pasado lentamente por mi memoria y los lindos recuerdos de tantos viajes, y de todo el esfuerzo que se hizo para ser un arquero de dimensiones internacionales me aturden. En gran gesticulación como en el mejor cine mudo, he visualizado todos los momentos de alegría y tristezas, de grandes triunfos y grandes derrotas, de títulos conseguidos y de perdidos, de tanto placer por mi posición en el campo en cada entrenamiento diario, de tanta ilusión juvenil y tanta decepción adulta, de tantos amigos buenos compañeros que coseché y de tantas maldades que por mi origen acumulé.
Haciendo un “stop”, creo que es momento de ser valiente y honesto con mi pasión y tomar una decisión pronta. Porque cuando no te sientes bien. Cuando ya no puedes competir de igual a igual. Cuando el corazón quiere y el hombro no puede. Cuando pasas mas tiempo en las manos del buen “Lucho Yupanqui”, mas no, en las del buen “Miguelón”. Porque cuando tienes que competir con tres leones como Raúl, Lucho y Renzo, y no les puedes seguir el ritmo, porque cada estirada es una lágrima de dolor, cada estirada es un punzón profundo, en cada estirada se queda una parte de mi aún juventud ; es mejor ser honesto y como el buen Kevin Costner, tomar la decisión y decirle al jefe: “Que lo dejo por amor al juego”.
Así se llamaba la película que me conmovió hasta las lágrimas, “por amor al juego”. Eso fue lo que hice, siempre jugué por amor al juego. Nunca jugué por dinero. Jugué donde quise jugar y siempre fue con amor y por amor. Le entregué siempre mi corazón a los equipos que defendí.
Por eso: “Díganles, que lo dejo por amor al juego. Por amor a mi esposa. Por amor a mis padres. Por amor a mi familia. Por amor a los míos. Por amor a mis actuales compañeros. Por amor a mis verdaderos amigos de siempre. Por amor a los que confiaron en mí. Por amor a mis pocos seguidores e hinchas anónimos. Por amor a la “U”. Por ese inmenso amor que siento por el fútbol, que me hizo hombre.
Desde hoy pongo fin a mi historia como jugador de fútbol, pero, a los míos les digo que no temo y no teman por mi. Porque cuando finalizas una novela se empieza otra. Porque cuando finalizas un capítulo se abre y se escribe otro. Porque cuando uno cierra una puerta se abre otra, tan o quizás más intensa que la que se acaba e cerrar. Una puerta nueva y virgen, con nuevos retos y mejores motivaciones.
Por eso, cuando alguien deja a su gran amor no debe de mirar atrás, ni distraerse ojeando a los costados. Solo debes mirar hacia adelante, caminar sólo con dirección al norte y así, entregarte al horizonte, renovado en escribir una nueva historia. Por eso, cuando escribes fin, nunca debes mirar atrás, no voltees la cabeza, sal de tu capítulo, con la cabeza erguida, fresca, lista para comenzar a recorrer un nuevo camino.
Con ese mismo amor, hoy empieza mi nueva historia, empieza con mucho optimismo e ilusión el rodaje de mi próxima película y como Kevin, escribiré en una mágica pelota, díganles que lo haré siempre por amor al juego.

martes, 26 de enero de 2010

Fiesta de disfraces


Desde chico siempre me gustó escribir, narrar mis vivencias, mis anécdotas como parte del camino que he sabido recorrer por el mundo atrás de un balón, para aprender esa historia tan universal in situ. Porque si tengo que calificarme entre muchos adjetivos me ubico como un romántico de la vida que encontró en una profesión que es el Fútbol, la posibilidad de ir en busca de un elemento esencial en la conducta de la raza humana, que es el aprendizaje en la convivencia con la especie. En mis más de diez años como futbolista profesional, en esta década de vestirme con ropas cómodas para la transpiración, de disfrazarme en mi propio “super héroe” cada tarde y domingo de trabajo, he querido acercarme a todas mis grandes interrogantes sobre la vida y no he encontrado mejor respuesta a mis inquietudes en cada uno de mis viajes, en cada una de mis aventuras en regiones tan distantes a nuestro quechua oriundo, en cada parada de aeropuertos y en cada escala que como escalera me conducían al “ Know How” de mis miedos y claras respuestas a mis tantas preguntas sobre la rareza del ser humano; en sus grandes diferencias que son las lenguas y culturas. Tan antagonistas a la que los libros de “Coquito” supieron enseñarme de niño.
Había decidido no volver a hablar mas de la prensa para no cansarlos pero en la ultima semana en Campo un mar me encontré con tres hinchas que me animaron a hacerlo. Bien es sabido mi rechazo y veto a la prensa deportiva. Aunque valga aclarar que no es con todo el gremio pues en todos mis años de carrera si me ha sabido dar amigos y reconocer en profesionales capaces como Eddie Fleishman, Miguel Gutierrez, Gabriel el goico, Omar Ruiz de Somocurcio, Rubén Marrufo, el popular Vocha, Jorge Cruz del diario Depor, Vicente Cisneros gran conocedor de fútbol graduado en ESEFUL como técnico, Walter Arana del Todo Sport, Mauricio Cortez tan honorable como su apellido, mi tío Godoz y el angelito del once, Coqui Gonzalez, Pedrito García de CMD, Carmencita del Castillo del líbero y otros mas a quienes respeto, aprecio y no necesariamente tienen que conocer el consultorio de mi viejo, como un resentido social, valiente a puntas de “cachetada” con su cagón apelativo del bombardero afirma. Bien es sabido porque he hecho público mi rechazo por como se maneja la prensa escrita en sus turbios intereses y por la poca capacidad de análisis y conocimientos en dominios de temas específicos. Y no me escondo desde mi sucio, escritorio, apolillado por el odio y el resentimiento, el complejo y el rencor de tener un padre fracasado como coach que nunca pudo dirigir por incapaz.
Para ser abogado o ingeniero hay que ir a la universidad y comerte 10 ciclos de la materia. Para ser periodista efectivamente también hay que estudiar la carrera pero para hablar de fútbol o deportes en general, no basta con el bachillerato en ciencias de la comunicación o en periodismo. Es decir, para ser un leído critico o analítico político hay que ser sociólogo, o diplomático, o haber estudiado ciencias políticas. Por lo mismo para hablar de fútbol como disciplina hay que al menos tener el titulo de entrenador para dominar aspectos tácticos y metodologías de entrenamiento, hay que al menos conocer lo mínimo de preparación física, de medicina deportiva, de nutrición, de estadísticas mundiales no en resultados históricos como bien sabe el buen “Danielito” sino mas bien en datos que puedan servirle a un estratega para definir como jugarle al rival.
Nuestra prensa deportiva esencialmente la escrita adolece de muchos conceptos por lo que leo y no están preparados para orientar al hincha, porque no tienen la carrera de técnico de fútbol, o en ciencias del deporte, y todo lo contrario a la humildad acumulan demasiada soberbia con ese rollito de ser intocables por ser el cuarto poder.
Si fueran verdaderos especialistas pues entonces que marca de ropa es la preferida de Juan Vargas, o cuantos carros tiene Paolo Guerrero, o cuantos caballos y que bien viste Claudio Pizarro no serian tópicos de análisis ni de comentarios en un medio de comunicación, mas bien les interesaría escribir sobre que bárbaro cuanta masa muscular gano Farfán en todos estos años en Europa, podrían hacer un trabajo de investigación serio para enterarse con cuanto porcentaje de grasa y cual era su antropometría antes de irse a Holanda y como es la de hoy, o podríamos detenernos en observar cuanto mejoro Paolo o Juan o Claudio todos estos años en Europa.
Entonces, lo que necesitamos no solo es golpear por el ángulo mas mediático que son los jugadores, entrenadores y dirigentes. Sino tener esa humildad, que el poder de la tecla no entrega, ser menos orgullosos y con esa honestidad que últimamente nuestra sociedad adolece, recurrir a esa autocrítica que desconocemos y en solemnes votos de dignidad decir que más que periodistas deportivos somos amantes del fútbol.
Que amamos esta redonda pasión, pero, que últimamente sólo nos hemos ocupado a desfogar toda nuestra envidia, nuestro odio y nuestro complejo en cada una de las páginas que hemos sabido imprimir con la sangre ajena disfrazada de tinta en titulares satánicos y sátiros. Que efectivamente hemos estudiado comunicaciones y la mayoría no nos hemos especializado en ningún deporte para opinar con credibilidad y solo hemos decidido centrarnos en hacer noticias de escándalos, novias, burlas, faltas de respeto al ser humano, de crearle dolor a los familiares cuando leen medias verdades o campañas orquestadas para denigrar y dañar a un profesional del deporte en nuestras folclóricas y nada éticas columnas de nuestros diarios, y continuando con esa confesión sincera decir que nuestros fotógrafos solo van a disparar sus flashes para buscar la foto más polémica, o divertida, oportuna para un titular algún día agrio y malvado. Deberíamos con ese mismo martillo de sinceridad saber admitir que vamos disfrazados de periodistas deportivos cuando verdaderamente somos mas comunicadores de espectáculos, faranduleo, fiesta o salsa rosa.
Y lo más triste es que en nuestro paraíso de falacias, hemos terminado por contagiar también a nuestro serio decano y que este antiguo respetado diario en lo que es sus paginas de fútbol va disfrazado de pasquín, con secciones como “juego en corto”, donde una tecla goza a sus anchas vertiendo su odio en forma de cachondeo, de ironía y sarcasmo. Abusando del poder del anonimato, del poder de tener Internet y una PC gratis para publicar su veneno. Creyéndonos bacanes porque tengo el poder de llegar de yapa o disfrazado a tu casita dentro de un prestigioso diario. Y que por su contenido la redacción de fútbol mas parece una fiesta de disfraces ya que muchos de sus redactores antes han sabido colocar sus glúteos en bocones o liberos escritorios y hoy van disfrazados de caballeros serios con supuesta mente una pluma más elegante.
Y tu, buen Carlitos de un solo Vaso junto a tus camaradas ¿de que van disfrazados?

lunes, 2 de noviembre de 2009

Aclaración I



El día viernes 30 de octubre de 2009, en la edición número 197 del primer año del diario “DEPOR”, en su valerosa sección de “CONFIRMADISIMOS” un anónimo redactor, hostigador constante u hostigadores constantes de Juan Reynoso publica:
“Seguimos sin entender al “Cabezón”. En lugar de concentrarse en el Bolo, piensa todo el bendito día en cómo fastidiar a la prensa. Resulta que las prácticas de ayer (jueves 29 de octubre del 2009) iban a ser en Campo Mar, pero al final – y sin avisarle a nadie- cambió la chamba para la cancha auxiliar del Monumental. Cuando llegó la prensa ordenó a su gente correr hacia la cancha principal. En fin… nosotros hacemos nuestro trabajo para que el hincha este enterado”.

(Pero lo hacen mal porque nunca contrastan los hechos solo informan la película que tienen o se hacen en su maquiavélica “cabecita”) Para luego una vez más informar en su página de información al hincha lo siguiente: “… Lo curioso fue la manera como el “Cabezón” (y dale con lo de cabezón) trató de “guardarse” la información. Ayer intentó despistar a todos diciendo que los entrenamientos serían en Campo Mar. Pero al final “cambió los planes” y se fue al Monumental. Depor llegó volando a Ate y así pudo pillar al técnico cuando trabajaba con el equipo en la cancha auxiliar. Por eso cuando Reynoso se dio cuenta de la presencia “enemiga” cogió sus cosas y corrió junto a sus jugadores hasta la cancha principal para seguir jugando a las escondidas”.
Pero no queda ahí, en la edición 5256 del año 15 del mismo día viernes 30 de octubre del 2009, el diario “líbero”; en su frontal y valerosa sección “POR MI MARE”, donde la firma un tal “Huérfano”, donde inclusive a su ingenioso “comic” una gorra le cubre la cara; publican lo siguiente: “El Cabezón es bien tiki tiki. Como había sapos rabiosos chequeando el ¿trabajo táctico?, llamó a sus choborras y les pidió continuar la chamba en la cancha principal. El hombre tiene complejo de ser Pellegrini o Ancelotti, cuando con las justas tiene un título con Bolo, pero con la sele, hasta doctorado de fracasos y un cachetadón en Chile… ¡Veste con!”
Y para terminar esta persecución de dardos envenenados y acomplejados direccionados a una buena persona, que no juega con las cartas que estos manipuladores mediáticos exigen; el diario “el bocón” en su edición número 5712 del año 16 en el mismo día viernes 30 de octubre del 2009 publica en su página número 7:
“Ayer, pese que a anunció entrenamiento a puerta cerrada, Reynoso trabajó en la cancha auxiliar 2 del coloso de Ate, a vista y paciencia de los periodistas apostado (apostados va con “S”, porque es plural) en la calle, pero de pronto cuarenta minutos después, como si hubiera visto al diablo, corrió e hizo correr a sus jugadores para que abandonen el lugar y bajen a la cancha principal para realizar el partido de práctica”.
Con esto termino en transcribir lo que se publicó en los tres diarios deportivos en su cobertura ¿Periodística? de Universitario.

Salvo el diario “Todo Sport” que aparentemente no se fija en cojudeces y simplemente informa tácitamente lo que debe de informar: La información exclusiva de cara al partido del día sábado 31 en Tacna. Y eso que también les tocó mirar la práctica desde la calle y desde acá los aplaudo porque no dejan que su pluma se vea infectada de ese odio tan grande hacia Juan Reynoso y no caen en este macabro juego de querer destrozarlo, presionarlo e inclusive lograr destituirlo porque simplemente no les cae bien o no les da las facilidades que tan acostumbrados están.

Ahora deseo aclarar y demostrarle a los que me siguen, que muchas veces lamentablemente los que ¿Informan? Son cegados por su odio, complejo y fantasía de ser el cuarto poder y parece ser que no comprueban que los hechos, no han sido de la manera en que los narran.

Lo que sucedió fue lo siguiente: El día miércoles 28 de octubre por la mañana, en la charla previa a la práctica en Campo Mar, Juan nos preguntó donde preferíamos hacer la práctica de fútbol del día jueves 29 de octubre. Le respondimos que por la calma y tranquilidad que tenemos para trabajar, preferíamos hacerlo en Campo Mar. Pero al finalizar el entrenamiento, Juan nos comunicó: -debido a que la cancha no estaba en tan buen estado prefería trasladarnos al Monumental-. Así, que desde el Miércoles 28 sabíamos que entrenaríamos el jueves 29 en el Monumental. Para los que no saben, normalmente nosotros analizamos los videos del más cercano rival en el vestuario del comando técnico. Así que al terminar de ver el video del Bolo, Juan nos comunicó que la Cancha principal estaba en mantenimiento, así que para no maltratarla y cuidarla para que este en perfecto estado el día miércoles de cara al partido contra Cienciano, haríamos los primeros 40 minutos en la cancha auxiliar y a un trote ligero para no enfriarnos bajaríamos a la cancha principal del Estadio. En la superficie auxiliar haríamos remates al arco y trabajos de posición de balón y en la cancha de todos los domingos haríamos los trabajos específicos para el sábado en Tacna ponerlos en juego. Como los trabajos de movimientos y de alineaciones de acuerdo a las necesidades del juego.

A lo que voy es que en ningún momento Juan Reynoso ha planificado “joder directamente” a la objetiva prensa nacional. Doy fe que en nuestras motivaciones y objetivos no tenemos la mediocridad ni el tiempo suficiente para planificar premeditadamente o No, como joder, a los que cubren y deben informar correctamente el día a día del club.
Porque la historia de un ganador o como un ganador de la vida se forja, es mirándose a uno mismo y no mirando en el ojo ajeno. Porque sin ofender, un equipo campeón no tiene el tiempo suficiente para detenerse en mediocridades, en maldades, en bajezas, en huevadas, para jugar a las escondidas o estas tonterías que se publican. Todo equipo campeón o que busca ser campeón, tiene que preocuparse por los detalles de fútbol, de preparar la semana, de mirar al rival, de mirar al interior de tu propio equipo. Estoy convencido que el señor Juan Reynoso, no se detiene en estos pequeñísimos detalles domésticos de fábulas de redacción. Porque nadie que no firma sus crónicas o que se hace llamar el “Huérfano” o “Jesús Ángel”, es tan importante como para perder el poco y valioso tiempo que se tiene.


No puedo dejar de manifestar mi más profunda indignación por cómo se están manejando las informaciones tan negativas y falsas referentes al plantel. Como la gran ignorancia de criticar las rotaciones.

No se puede ser futbolísticamente tan bestia, como no poder identificar que más que un capricho, esto de las “rotaciones” es una filosofía de una “cabeza pensante” y no de un “cabezón”, como despectivamente llaman a un hombre que se merece respeto, desde el punto de vista que tiene la gran responsabilidad de comandar los sueños de 30 muchachos, que representan a más de siete millones de peruanos.

Porque las rotaciones no son más que identificar que existen puestos dentro de un once que no necesariamente deben ser siempre titulares. Porque los sistemas y los hombres, EN EL FÚTBOL MODERNO, hoy varían de acuerdo a las necesidades del rival. Porque hay rivales que necesitan jugadores más veloces y otros con mejor determinación en la marca. Pero si analizan y es algo que nunca saben hacer, hay puestos claves que no se rotan. Como las defensas centrales o el arquero. Todos los demás son “rotables” en el sistema, de acuerdo a las necesidades de la exigencia del equipo rival. Sería bueno ver futbol internacional y notar como todos los entrenadores modernos tienen esta filosofía, que no hace más que incentivar la competencia dentro de un plantel.

Basta ya de faltarle el respeto a los otros 16 que ustedes no consideran competitivos dentro de sus 14 de siempre. Basta ya de condimentar sus crónicas con historias fantasiosas que parecen no estar nunca contrastadas, y que tienen esa misma ligereza con la que insultan y nos maltratan llamándonos “choborras” en sus cobardes columnas. Basta ya de maltratar a Reynoso y de perseguirlo y de levantarle el pueblo, por el simple hecho de no darles el fácil ingreso a todas las prácticas.

Acaso todas las personas ajenas a su redacción, son bienvenidas en su diario. Acaso si quisiera ingresar a su oficina, la seguridad no me detendría en la puerta y me ordenaría identificarme con DNI y exigiría una invitación de algún redactor o ejecutivo del diario. Yo estoy convencido que cualquier hijo de vecino no ingresa tan fácilmente a su sala de redacción ¿O sí?, si a mí no me invitan a una fiesta no voy. ¿Por qué si existe el legítimo derecho de entrenar a puerta cerrada, tengo que indisponer al dueño de casa con los vecinos que no son invitados al baile? Sería bueno que detengan esta casería de brujas porque halloween ya pasó. Y también sería bueno que dignifiquen nuestra profesión y elevemos el nivel y dejemos de llamar despectivamente a un profesional serio. No creo que les agrade que injustamente se les llame de “apestosos pezuñentos” o tantos adjetivos tan descalificativos que se podrían crear. Y que no les pertenecen, obviamente.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Aclaración II

En la edición número 5258 del año 15 del domingo 1ero de Noviembre de 2009, en el diario el “Libero” en la página dedicada al club Alianza Lima, colocan un titular en llamativas letras rojas que dice “ZORRITO O BURRITO” (en alusión a Wilmer “el zorrito” Aguirre).
Y luego continúan con la maliciosa información que más que información es una Afirmación. Si no saquen ustedes mismos sus propias conclusiones:
“Wilmer Aguirre ya no es ese delantero eficaz y peligroso en el área. Ayer sumó otra tarde para el olvido y erró de manera increíble hasta cuatro ocasiones claras de anotar en el arco del CNI”.
Para luego continuar con algo que en lo personal me parece gravísimo, más que grave es una afirmación basada en rumores pero que no lo han dejado de afirmar que tranquilamente podría traerle una querella al redactor o al editor de este diario. Veamos: “Aunque algunos intenten tapar el sol con un dedo y traten de cubrir al compañero, se sabe muy bien que el “Zorrito” no se está cuidando después de los entrenamientos. Su tiempo libre lo dedica a cualquier cosa menos a descansar como se debe. Y esa falta de profesionalismo le está pasando factura”.
Como les decía saquen sus propias conclusiones, pero, que quiere decir el diario con que “erró de manera increíble hasta cuatro ocasiones claras de anotar en el arco del CNI”. Ósea, que los que cubren los cotejos del fin de semana, los hacían.
No les parece envidia, frustración, de no poder estar en esa área chica y tener que ver el desarrollo del juego desde el palco de periodistas bastante lejanos a esa cajita mágica que es el arquito. Lo que sí sé, es que desde la tribuna todo parece más fácil y más con la plumita en mano.
Pero no queda ahí, esto sí es gravísimo, por no decirlo menos. A que se refieren cuando dicen:”Aunque algunos intenten tapar el sol con un dedo y traten de cubrir al compañero, se sabe muy bien que el Zorrito no se está cuidando después de los entrenamientos…. Y esa falta de profesionalismo le está pasando factura”.
Es decir, esto no les parece una maldita y maliciosa afirmación que no viene al caso. Ósea como se puede saber si Wilmer Aguirre duerme o no. Acaso viven con él o son su colchón. O: ¿Qué quieren dar a entender con esta información, que atenta contra la imagen de un jugador salido de las canteras del popular Alianza Lima? Si reparamos bien en esta información es hasta peligrosamente difamatoria.
Y en lo personal esto ya me genera mucho asco y preocupación. Cuando leo estas tendenciosas notas, tan tendenciosas, me trae recuerdos cuando en la semana del clásico escribieron tantísimo de mí por no querer hacer una portada con José Carlos Fernández, por no querer prestarme al circo mediático de hacer el ridículo con raros disfraces o con fotos y conversatorios que son todo menos futbol, o porque simplemente solo quería no hablar y dedicarme a preparar el partido. Por ser quizás distinto a los que ellos quieren y no complacer el provocar más ventas se publicaron títulos como “Paco Gelatina”.
Yo a Wilmer Aguirre no lo conozco, quizás nos hemos enfrentado en varias oportunidades desde los juveniles, pero, no compartimos amistad. Quizás si comparto, un gran respeto por su trayectoria, pero, no pasa de ser un colega de profesión. Pero al leer esto me veo tan afectado como lo han podido afectar a él y a su familia. Y me veo obligado (como deberíamos de estarlo todos) a compartir la bilis, la angustia, la rabia, el dolor de su madre, de su pareja, la vergüenza que seguro ha tenido que sentir hoy durante todo el día al leer esta bajeza. Y digo bajeza porque aunque no lo pueda afirmar(como estos poca cosa están acostumbrados) mi olfato me orienta a identificar que es una nota totalmente personal.
Que el ataque a Wilmer es parcializado y de carácter personal. Porque hoy, por fin he visto esas cuatro ocasiones clarísimas que cualquiera las hacía y solo me queda felicitarlo. Porque se las creo él solo, a base de fuerza y velocidad. Luchando contra el defensor rival que le sacaba dos cabezas, peleando el espacio con esa potencia que lo caracteriza. Porque inclusive en el gol del triunfo se fajó en un gigantesco salto para ganar una posición como lo hizo todo el juego. Y eso sí, alguien que no duerme no podría correr como sigue corriendo, y sacándose rivales como se los sabe sacar cada fin de semana.
Basta Ya, paremos la mano y dejémonos de estos repugnantes y querellantes maltratos mediáticos. Creo que ya es momento de unirnos. Es nuestra hora, la hora de los que pateamos la pelotita y los que con nuestro esfuerzo semanal pagamos muchos sueldos de unirnos y hacernos sentir. Se han puesto a pensar, ¿Qué pasaría si todos los jugadores profesionales de la liga peruana, dejáramos de declarar a la prensa?, acaso como gremio hemos analizado ¿Qué pasaría si así, como en el 2003, nos la jugamos y detuvimos el campeonato y a raíz de esa huelga deportiva se mejoraron muchísimas condiciones de trabajo, que pasaría si se hace una huelga de palabras mudas?
Wilmer quiero aprovechar mi blog para darte mi respaldo y apoyo y como le dije al otro Zorrito: “No sufras por esta masa que sí sabe cubrirse y protegerse en su plumita cisne de a menos de un sol. Que seguramente el lunes cuando los encares (como encaras endiabladamente a tus rivales) te dirán que estaban en su día libre y el clásico yo no fui. No sufras por esos mismos que no son capaces de escribir “Carling Cup” y como “burritos” publican “Curling Cup”. No sufras que los que te conocen de cerca seguramente saben que eres un buen hijo y que por lo que he visto amas a tu alianza y ese cariño de tu comando no cuesta cincuenta céntimos. Sigue afilando rivales como lo haces y sigue por el camino de las pulsaciones como lo hacías en Europa. Ese viejo continente, que para los que te golpean a color rojo, solo lo han podido ver por “History Channel”
“Hoy, soy un guerrero que libra sus batallas sólo, acompañado de 26 peleadores, pero, estoy convencido que en el futuro y muy pronto se unirán a mi ejército más duros gladiadores y juntos daremos cara y seremos capaces de domar a estos fieros gatitos”.

sábado, 17 de octubre de 2009

Vestuario Querido

Un vestuario de fútbol normalmente para los que no estamos en este negocio, a veces tan repugnante, es como un santuario. Un subterráneo, como normalmente siempre lo han sido, impenetrable. Un bunker donde se atrincheran los bravos guerreros que saldrán prontamente a defender la camiseta amada, a defender la casa de los ataques del enemigo visitante. Es la caja de los sueños de todo inocente niño amante de este apasionante deporte. Un vestuario de fútbol es el lugar anhelado. Es la barrera que separa ( INJUSTAMENTE) a los que somos protagonistas directos de esta pasión y a todos los demás antagonistas ( que sin ellos no existiría esta apasionante novela).

Un camerino, como se le llama en España, es en muchas oportunidades el lugar que guarda miles de secretos. Que terminan en mitos, ya que muchas veces es impenetrable. Al menos lo es, para los que no trabajan directamente con el equipo. Son impenetrables para los que inventan la noticia. Un vestuario muchas veces no es más; que un lugar amplio, cómodo (en la gran mayoría de nuestros alicaídos estadios no es nada de esto), pero, sigamos imaginando.

Decía que era un lugar amplio, cómodo, con bancas y casilleros, camillas, mesas, inodoros, duchas abiertas, y muchos santos. Un vestuario los días de un juego respira calma, risas, olores a frotación y cremas mentoladas, olores humanos, tiene mas risas, cierto nerviosismo cuando ya se acerca la hora de salir a dar la vida y algunas costumbres geniales. Como los cánticos de batalla y las bravas “hurras”.
Especialidad del Puma… “muchacho no hay que se huevone… ya, ya, ya ¡Vámo Carajo!” (Como se te extraña José Luís, deberías visitarnos más seguido).
Bueno como decía: sabe a padres nuestros y aves Marías, a palmas motivadoras, a abrazos y suertes. Y de mucho, mucho compañerismo.

Para mi un vestuario es todo esto y algo más importante, que quizás algunos no lo entienden así. Un vestuario es como la salita de café de una oficina. O la salita de las maquinas fotocopiadoras de un banco. Es simplemente un lugar sociable y de compartimiento antes de salir a trabajar. Es decir, antes de salir a donde esta la oficina principal, que es esa gigantesca alfombra verde.

Un vestuario fuera de tanta leyenda urbana, que a veces nos toca leer en estos periodicuchos (que sólo sabe de enfrentamientos, golpes, insultos, grupos maliciosos contra comandos técnicos, más desacuerdos y más golpes, enemistades, y todo lo que genere morbo), es simplemente un lugar espectacular.

Donde no solo te aseas, también convives con tan buenos y diversos compañeros que te toca conocer. Es un lugar cerrado para el público, pero, que finalmente no es mas que un lugar donde nos ponemos al día de los chismes futboleros, hacemos bromas, hablamos del próximo partido, del pasado, nos pesamos para salir a entrenar, nos reímos de las tomaduras de pelo entre nosotros, a veces tomamos el desayunito rico que suele traer Ñol (que antes traía el Puma).
Simplemente convivimos como convive cualquier mortal en su centro de trabajo. Y claro también guarda historias como las que hoy me reveló en una corta entrevista (que pronto colgaré) el popular “pajita”.

Un vestuario es eso. Una congeladora de recuerdos. Un cementerio de resultados, de tristezas y alegrías. Es una enciclopedia de hábitos, es un concierto de gritos, cantos, lamentos y risas.
Es una caja que encierra conductas humanas. Tan humanas como solo vestirte. Es que finalmente es eso, es el cuarto de armas. Donde se prepara el guerrero para pintar las paredes con grafitos de pases sutiles y recias patadas.
Un vestuario, solo ve la luz un domingo de fútbol, un domingo de arte.

jueves, 15 de octubre de 2009

El Anti: Ser o no ser

El martes de esta semana, consternado escuchaba como un estadístico reportero, inducía a un muy correcto jugador de la selección Nacional, para que hable de su gran profesionalismo; contra el poco y mal profesionalismo del resto de seleccionados. Felizmente este compañero de profesión no piso el palito. Porque el cambio de los resultados no necesariamente parte por el gremio de los que patean la pelota.
Es que nosotros somos las grandes victimas del deporte. Ojo, que con el don otorgado por un ser supremo de coordinar mejor tus movimientos y así poder dibujar con los pies mejores trazos que otros, no es suficiente. Muchos de los que jugamos al fútbol carecemos de información elemental en nuestra formación. Información de lo que es correcto y de lo que no es correcto. Información básica del porque se hacen las cosas, del porque a inicio de semana realizo un trabajo tipo y de mitad de semana para adelante realizo otro. Información del porque debo de utilizar cada superficie del pie indistintamente de acuerdo a cada golpeo específico del balón. Información de estrategias y de sistemas tácticos, información de filosofía futbolera, de historia futbolera y también de cual es y cual siempre fue nuestra identidad futbolística. Información del porque debo dormir adecuadamente, o alimentarme correctamente.

El futbolista peruano carece también de inversión (salvo algunos clubes como Universitario, Cristal, Alianza Lima, San Martín, Esther Grande Bentín y paro de enumerar), realizan una verdadera inversión en lo que finalmente se convertirá en un “bien Futuro”. Porque eso es el futbolista moderno Un producto que se coloca en el mercado y que te genera muchísimo dinero. Y a costillas de él o de ellos, muchos comen, educan a sus hijos y viven una vida de película que jamás pensaron vivir.

Basta ver a algunos comentaristas de TV que son a lo “Hollywood”, estrellas de comerciales de TV.
Y claro, no basta con bombardear de puros “cañonazos” a los medios de recepción con que el futbolista en el Perú no es profesional. Para mí esto es muy simple, se llama profesional del deporte porque recibes una remuneración económica por un servicio que se presta a una sociedad o empresa. (Que muchas veces en el Perú la percibes TARDE, MAL Y NUNCA).

Entonces, un abogado de prestigio, que factura hasta la vida misma para ganar un “caso”, deja de ser un mal profesional porque quizás bebe unos scotch´s con algunos amigos de profesión, o porque frecuente alguna vez a la semana un lugar público social para distender algún estrés propio del trabajo ¿Acaso un litigante por bailar, reír , llorar, gozar placeres carnales y placeres que Dios con su naturaleza nos ha entregado, deja de ser un buen profesional, un profesional correcto o simplemente un profesional desde el punto de vista que cobra una mensualidad por asesorar a un no litigante? ¡Es decir!

Por favor dejemos de satanizar al futbolista nacido en el Perú. Dejemos de satanizar el fútbol que tenemos, la liga que tenemos. Tenemos lo que hay que tener. El fútbol no esta ajeno a la realidad nacional. El fútbol es y el futbolista es lo que su sociedad es. El futbolista no esta lejano a la idiosincrasia de los que formamos la sociedad. Si un habito de consumo natural en una sociedad es beber cerveza entonces ese humano que algunos creen “humanoide”, beberá cerveza. La clave del éxito esta en orientar, en informar cuando se debe de beber la cerveza y no en aprovechar la poca información que la gran mayoría de nosotros recibimos desde que iniciamos con esto de las pataditas.

Cuando todos sepamos el porque de hacer una rutina, el porque no debo beber más alcohol de lo correcto (porque el alcohol deshidrata y la deshidratación genera las micro y macro roturas de fibras en el paquete muscular)

Simplemente pido que nos den el PORQUÉ. El por qué para poder pelear de igual a igual, con las mismas armas que seguramente si tienen los brasileros o argentinos. Que se creen centros de alto rendimiento o los famosos centros de fondos de inversión, como existen en países del África o Europa, donde visionarios inversionistas crean maquinas de hacer goles. Con porcentajes de grasa mínimos, piernas mejor formadas, más rápidas, más explosivas, mejor coordinadas, más violentas, más fuertes, hombros más sólidos, cabezas más cultivadas. Esto es lo que necesitamos, porque estoy convencido que no por ser malos profesionales somos los últimos de Sudamérica. No por una fiestita perdemos un partido. Porque vaya a saber las fiestas que tiene encima Cristiano Ronaldo, o las botellas de champagne que beberá Drogba.

Porque ser profesional no tiene nada que ver con ganar o perder. Mi postura es que estamos totalmente equivocados si pensamos que no hemos clasificado al mundial por el escándalo del “Golf los Incas”. Eso sería tapar el sol con un dedo, sería ver el árbol y no el bosque. El problema no pasa porque tanto beba, baile, duerma, coma o lo que sea un jugador de alto rendimiento.
Esto es muy simple, sería más fácil pisar tierra, identificar que Perú a nivel sudamericano nunca fue una potencia. Que en nuestros mejores años fuimos como un Colombia de los 90 o un Ecuador de los últimos años. Que tenemos menos triunfos que derrotas y que las veces que fuimos a los mundiales fueron contadas. Que hace muchísimo salvo algunos deportes individuales no ganamos nada a nivel mundial. Que el sistema educativo y deportivo no existe desde su raíz: “El Estado”. Y entonces sería más constructivo enfocarnos en el sistema y en la pobreza de información sobre conceptos de fútbol mínimos.

Es decir, seríamos más competitivos si la gran mayoría por no decir TODOS los que pateamos la pelotita llegáramos al primer equipo listos para ser utilizado por el técnico y no a formarnos y a aprender conceptos de táctica. A mejorar la técnica y la definición. A quizás por primer vez escuchar “palabritas” raras que se utilizan para indicar movimientos tácticos dentro del sistema del parado defensivo – ofensivo del equipo. Como no sucede en todos los equipos de Europa donde las canteras conviven directamente con el primer equipo.
Son los lustrabotas de los de arriba, los recoge bolas, comen juntos, conviven con sus estrellas. Así cuando llegan al primer equipo tienen instalada la mística de la institución. La adaptación a la idea de juego entonces es un proceso instantáneo y la integración al proyecto se logra de manera natural.

Ser profesional es involucrarse con el proyecto del año. Es comprometerse con los objetivos de la institución que hoy te alimenta. Es entregarte a la meta de fin de año. Lamentablemente muchas veces no se sabe cual es “Gran Objetivo”, ni mucho menos se conoce como será el camino y los pasos para lograr esta meta anhelada.

Dignifiquemos nuestro fútbol y dejemos de golpear por el lado más vulnerable. Identifiquemos que el GANAR, es consecuencia de un juego o de un juicio. Ya es hora de pelear de igual a igual, con las mismas armas, con las mismas piernas.